La Meditación en la Medicina Ayurveda

La meditación en Ayurveda es la mejor manera de combatir el estrés diario. Científicos de la Universidad de California, plantel Los Angeles (UCLA, por sus siglas en inglés), estudian actualmente la relación entre la meditación y la estructura física del cerebro. Los investigadores de la UCLA tomaron como referencia a 50 personas que meditaban desde hacía 20 años e hicieron resonancias magnéticas de sus cerebros.

El resultado más impresionante del estudio fue observar que, entre más tiempo llevaba el individuo con esta práctica, más relaciones neuronales generaba y que esto era muy notorio en contra de las persona que nunca habían practicado la meditación. Las áreas en las que más neuronas se habían generado tienen que ver con las funciones mentales del cerebro: pensamiento, memoria, juicio y decisión. Cuanto más tiempo se lleva practicando la meditación, mayor es la cantidad de “sinapsis” (relaciones entre células cerebrales) que se realizan. 

La medicina tradicional de occidente considera principal tratar y curar el cuerpo. Ahora muchos médicos están aprendiendo la relación entre la mente y el cuerpo. Al curar la mente, el cuerpo se cura de forma automática. La mente se manifiesta en varias partes de nuestro cuerpo entero, así pues la química está en constante comunicación con el sistema inmunológico a través del cual se crea enfermedad o salud. Sin embargo el sistema inmunológico puede ser condicionado de forma consciente usando prácticas autorreguladoras como la hipnosis, biofeedback o la meditación.

La mente se manifiesta en varias partes de nuestro cuerpo, así pues los receptores y neuropéptidos, están en constante comunicación con el sistema inmunológico a través del cual se crea enfermedad o salud. Sin embargo el sistema inmunológico puede ser condicionado de forma consciente usando prácticas autorreguladoras como la hipnosis, biofeedback o la meditación.

Muchas investigaciones como la del Dr. Bruce Lypton revelan que nuestros pensamientos, sentimientos, nuestras decisiones, conductas y experiencias producen profundos efectos curativos en nuestro cuerpo. Ernest Rossi escribe en La psicobiología de la expresión genética “Nuestros estados mentales subjetivos, nuestro comportamiento motivado conscientemente y nuestra percepción de libre albedrío pueden modular la expresión genética para optimizar la salud”. Véase los genes como fuentes de información codificada, llena de posibilidades para poder ser expresadas.

Neuroquímicamente hablando es lo mismo, si el cuerpo está experimentando una nueva realidad verdadera o ficticia. Mediante este proceso empezamos a desactivar antiguos genes y a crear nuevos circuitos neuronales, que a la vez enviaran nuevas señales para activar otros genes. Estos nuevos circuitos neuronales empiezan a reorganizarse reflejando lo que estamos pensando referente a nuestra nueva realidad. En este momento nuestro cerebro y cuerpo ya no experimentan el mismo estado del ser sino uno completamente nuevo, que hemos diseñado nosotros, los nuevos pensamientos son ahora la experiencia que hemos deseado.

meditación ayurveda

 

Desde el Ayurveda y por medio de la meditación se puede lograr un nuevo estado del ser, combinando una clara intención de abandonar antiguos arquetipos con un estado emocional intenso. Este estado de alegría y entusiasmo que se produce por lo nuevo que estamos creando, comporta nuevas actitudes, creencias y percepciones, por tanto tendremos nuevas experiencias y emociones que mejoraran nuestra salud y nuestra vida en general. Las huellas del pasado desaparecen en el cerebro y en el cuerpo los nuevos sentimientos, pensamientos y actitudes crean un nuevo programa neurológico una nueva energía que producen cambios genéticos en el cuerpo. 

Vivimos una vida totalmente sensorial, al prestar más atención a nuestro mundo exterior que a nuestro mundo interior. Recientes investigaciones han develado que viviendo de esta manera, nuestro cerebro funciona en un patrón más reactivo, inestable y volátil.  La actividad eléctrica de nuestro cerebro aumenta, así como el ritmo cardíaco, el cuerpo se encuentra permanentemente a la defensiva, protegiéndose e intentando soportar un día más. En este modo el cuerpo no dispone de recursos para curarse y mantener una salud óptima. Las distintas partes del cerebro dejan de comunicarse entre ellas y dejan de comunicarse con el cuerpo con eficiencia.

El cerebro envía mensajes desordenados desde la médula espinal al resto del cuerpo por lo que ningún sistema (sistema cardíaco, sistema respiratorio, sistema digestivo, sistema inmunitario, sistema endocrino…) recibe un mensaje claro. En este estado el cuerpo se desequilibra creando un entorno favorable para el desarrollo de enfermedades como arritmias, hipertensión, cáncer, indigestión y reflujos gástricos, alergias, artritis reumatoides o resfriados entre otras.

Durante la meditación, cuando cerramos nuestros ojos y dejamos de fijarnos en nuestro mundo exterior y en sus estímulos y dirigimos nuestra atención al espacio que nos rodea, favorecemos que los patrones de nuestras ondas cambien a un estado más tranquilo y creativo. Nuestro mundo interior se vuelve más real que nuestro mundo exterior y creamos una atmósfera más propensa para realizar los cambios que queremos realizar. Nuestro cerebro se vuelve más organizado y sincronizado, enviando señales más coherentes desde el sistema nervioso al resto del cuerpo y entonces todo empieza a funcionar mejor. Podemos cambiar nuestra información contenida en una parte de nuestro inconsciente. El concepto pasado, presente y futuro es puramente mental, la información está en el presente.

En la medicin Ayurveda, la meditación es una herramienta capaz de recuperar la salud física, mental y emocional. Nos permite aumentar nuestros niveles de confianza personal, pasión por vivir, claridad mental, y mejorar nuestra capacidad para alcanzar nuestras metas y objetivos. La meditación es una técnica que, al ser correctamente desarrollada y utilizada, lleva al ser a profundos estados de relajación, que se ha comprobado tienen fuertes propiedades sanadoras.

Lo que hace la correcta meditación es inducir al cerebro a estados de relajación, que se denominan estados alfa, delta, logrando que por el periodo que estamos en un estado meditativo, cambiemos nuestro estado anímico a mayor paz y tranquilidad, y por lo mismo, el entorno de todas las células del cuerpo también se empapen de esta emoción. En este estado meditativo, el estrés almacenado se libera, ya que las células del cuerpo vuelven a abrirse a su entorno, reciben los nutrientes necesarios, se liberan las toxinas de su interior y vuelven a comunicarse correctamente con otras células.

La práctica prolongada normaliza el correcto funcionamiento del ser a niveles físico, mental y emocional, debido a que las células vuelven a operar de manera eficiente. Se recomienda hacer la práctica de manera periódica, debido a que la meditación busca en primer lugar es entrenar la mente para que se haga consciente de ella misma, que sea capaz de advertir cuando estamos bajo la influencia del miedo, la rabia, la angustia, la ansiedad o cualquier otra emoción restrictiva, ya que esto es lo que debemos sanar, estos recuerdos restrictivos que se encuentran en nuestra memoria, en nuestras células.

De esta manera nos volvemos conscientes de nosotros mismos, y logramos identificar cuándo las emociones nos están invadiendo en nuestro día a día, ya que si no somos conscientes y actuamos a través de ellas, volvemos a alimentar estas emociones, esos recuerdos, menoscabando la forma de cómo enfrentamos la vida. Estas reacciones es el denominador común en la sociedad actual, producto de miedos e inseguridades que la propia vida nos ha dejado, como huellas, marcas y heridas no sanadas, que vamos plasmando en nuestra vida y sociedad. 

En términos generales en nuestra salud incide:

Meditar

 

  •  Nuestro grado de autoestima
  •  Nuestra relación con los demás
  •  Nuestra respuesta a experiencias o recuerdos traumáticos
  •  La manera en que administramos la energía en situaciones cotidianas

Según Ayurveda la causa de todas las enfermedades proviene del concepto de individualidad o Ahamkara (ego), que nos separa de la inteligencia cósmica. Buddhi, la sabiduría o nuestro conocimiento es una clave en nuestra salud. Cuando Buddhi tiene un movimiento descendente se le llama ignorancia o falta de sabiduría y cuando tiene un movimiento ascendente se le llama sabiduría o inteligencia.

Por ejemplo consumir cada día una gran cantidad de azúcar, alimentos desnaturalizados, tratados químicamente, con conservantes y colorantes esto provoca enfermedades y lo sabemos. La cuestión radica en si queremos comenzar a utilizar nuestra inteligencia para escoger hábitos que beneficien nuestra salud y consciencia.

Todas las enfermedades examinadas desde el punto de vista Samkhya, pueden ser consideradas como una falta de sabiduría, por lo que podemos afirmar que nuestra salud está en nuestras manos. Para la medicina moderna será difícil tratar las enfermedades mientras no reconozca el principio inteligente tanto del universo como de nuestro cuerpo, cuando nuestro “yo” Ahamkara busca expresarse con la ayuda de objetos materiales, las relaciones emocionales, y todas aquellas experiencias que absorbemos mediante los cinco sentidos, no conduce a la insatisfacción, pues es imposible obtener placer permanentemente a través de nuestras experiencias sensoriales. Samkhya nos dice que la raíz de toda enfermedad es el identificarnos más con nuestro ego (Ahamkara) que con nuestra conciencia pura Purusha.

El Charaka Samhita, uno de los textos de Ayurveda más antiguos (anterior al año 1000 A.C.) dice que:

“Las causas de las enfermedades del cuerpo y de la mente están unidas a una mala utilización del tiempo, de las facultades mentales y de los sentidos. “El cuerpo/mente es el sustrato de las enfermedades y de la salud. Utilizar el tiempo de manera equilibrada así como las facultades mentales y los sentidos, da salud. Una utilización inadecuada o desequilibrada trae enfermedades”. 

A través de los cinco sentidos percibimos las impresiones del mundo que nos rodea. Estas impresiones nos condicionan nuestra mente (Manas). Según ayurveda dichas interpretaciones que hace Manas nuestra mente, influencian directamente a nuestro “yo” o ego (Ahamkara), a nuestro intelecto (Buddhi) y a nuestra mente consciente y subconsciente (Chitta). Manas tiende a interpretar aquello que le es propio en su entorno de tal manera que nuestra mente queda condicionada por las impresiones que recibe de nuestro entorno, perdiendo el potencial de discernimiento.

Necesitamos autoobservarnos y desarrollar la capacidad de discernir y discriminar, en definitiva ir más allá de nuestro sentimiento del “Yo”. Una de las principales maneras de permitir desarrollar el poder de la discriminación es promover Sattva en nuestras mentes. En nuestra vida diaria los pensamientos se mueven a través de nuestra consciencia (Manas), pero cuando uno de estos pensamientos queda atrapado en nuestro interior, nos sentimos perturbados como cuando estamos estresados, ansiosos, preocupados, o cuando tenemos miedo, sentimos ira o frustración, o estamos deprimidos.

Esta es la base de todos los trastornos psicológicos o enfermedades mentales. El motivo por el cual queda un pensamiento atrapado es porque establecemos una relación con ese pensamiento debido a algún impacto del pasado. Lo más importante en estos casos es identificar el pensamiento atrapado, más que el analizar el porqué del problema pues así caemos en la trampa de quedarnos en el pasado y atrapados en la misma emoción. Una vez identificado el pensamiento ya tenemos ganado media batalla pues empezamos a librarnos de él. Después tenemos que decidir firmemente apartarlo y vivir en la felicidad y dejar de lado el pasado, para ello tenemos que destruir los hábitos mentales del pasado. Tenemos que decidir dónde queremos enfocar nuestra atención todos los días.

meditación

 

“La elección de la forma en que reaccionamos a nuestros pensamientos y actos, nos hacen esclavos o reyes” Vaidya Atreya Smith

A medida que asimilamos verdades e historias que alimentan nuestro espíritu, sentiremos que en nuestro interior se libera una energía que nos une y nos hace uno con el universo. Esta energía se presenta de muchas formas a veces sutiles y a veces mundanas, nos permite vislumbrar lo que antes no habíamos percibido. A veces puede tratarse de una energía protectora que nos hace sobrevivir de un accidente de tráfico, encontrarnos con algún desconocido que nos ofrece ayuda en el momento que más lo necesitamos, o nos hace regresar de repente a casa y descubrir que nos hemos dejado la estufa enchufada. Por esta misma razón o esta misma energía una enfermedad que llevaría años en curar, sana en un tiempo extraordinariamente breve.

Las personas que no aceptan o no creen que un determinado tratamiento les vaya a ayudar en su curación, de alguna manera es porque no logran pensar más allá de cómo se sienten. Nuestras mentes analíticas cuando están sobre-estimuladas por las hormonas del estrés,  son reacias a creer en nada nuevo o desconocido, ésta es una cuestión muy importante en el proceso de curación pues necesitamos de alguna manera silenciar la mente analítica para que la conciencia pueda operar en el subconsciente que es el lugar donde se producen los verdaderos cambios. En este sentido la meditación puede ser un gran reto.

 Nuestra realidad está delimitada por nuestro cuerpo, nuestro entorno y el factor tiempo. Cuando estamos estresados estos tres elementos se magnifican más, les prestamos más atención, por eso si queremos cambiar algo en nuestras vidas tenemos que mirar más allá de lo que vemos, de lo que sentimos y de lo que experimentamos; y fijarnos más en nuestro mundo interior que es más real que nuestro mundo exterior.

Tomado de la monografía Meditación en el proceso de sanación. Relación cuerpo-mente.

José Mario Rincón R.

Profesional en Salud Ayurveda