La psicología Ayurveda diría que cuando nos liberamos de la obsesión por ser perfectos y por controlar situaciones de vida que no están en nuestras manos resolver, independientemente de cuánto esfuerzo y entusiasmo le dediquemos para conseguirlo, vamos encontrando una manera más alegre, distendida y armónica de vivir.
En Ayurveda, cuando se habla de alcanzar la salud perfecta (svastha) se hace comprendiendo que el ser humano además de materia física también es materia sutil en diferentes niveles de conciencia. Ese cúmulo de energías a las que llamamos Ser está compuesta por un Ser superior, es decir, la parte de nosotros conectada con una inteligencia superior y universal.
Y un Ser inferior, esa parte que se recrea a si misma desde la mente ó lo que comúnmente llamamos ego. Cuando esta construcción mental o autoestima, se mantiene saludable, el cuerpo físico también. Restablecer la salud implica sanar la mente e incrementar la conciencia sobre nuestro Ser divino.
La medicinay la psicología Ayurveda ha desarrollado un profundo conocimiento sobre el comportamiento de la mente y lo aborda siempre desde la base de la teoría tridoshica. Si la escuela occidental, centra su discurso en la importancia de llevar a la superficie las emociones y experiencias reprimidas para luego comprenderlas y examinarlas a través de la asociación de ideas y verbalización de las mismas; la escuela Ayurvédica se centra en la importancia de trascender esas experiencias y emociones difíciles comprendiendo la naturaleza de nuestro ser.
La psicología Ayurveda
La meditación practicada de manera constante y la autoobservación son dos caminos que nos acercan a esa verdad. Expandir la conciencia significa crecer y evolucionar más allá de las limitaciones e ilusiones que nuestra mente y sentido corpóreo mentales construyen.
El proceso por el cual llegamos a niveles de conciencia más elevados, muchas veces puede ser retador y doloroso. Sin embargo, gracias a una compresión más elaborada de la naturaleza de nuestra propia alma y del porqué de la creación y repetición de patrones de pensamientos nocivos, la persona deja de luchar contra esa realidad que sostiene como verdadera y emprende un camino más alineado con su ser divino, dónde acepta y confía en un orden mayor y perfecto.
A medida que el paciente entiende los retos de la vida como oportunidades orientadas a despertar su percepción a una nueva verdad, el auto reproche, la autoevaluación y todo aquello que genera niveles desmedidos de ansiedad, angustia y depresión, van cediendo gradualmente. En ese proceso de transformación, la paz, la esperanza y la alegría de vivir se recuperan cuando se comprende lo inútil de encapsularse en el dolor y dejamos de oscilar como un péndulo entre dramas y momentos de éxtasis hasta colocarnos en un terreno medio más sereno y apacible.
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Basado en Halpern, Marc. 2001. Principio de la Medicina Ayurveda. Libro para la profesión ayurvédica. Segunda edición en español