Como sabemos, los doshas indican nuestro energía preponderante y marcan las tendencias fisiológicas de nuestro cuerpo, mientras que los gunas (sattva, raja y tamas), a un nivel psicológico, detallan estados concienciales del alma en esta encarnación, en este articulo revisaremos como la a partir de la integración de estas dos energías sutiles se expresan una gama de temperamentos y personalidades diferentes, empezaremos con vata dosha.
Frialdad, movilidad, ligereza son algunos de los atributos de vata y es por medio de ellos que vata recorre por emociones como miedo, preocupación, nerviosismo y ansiedad. En este caso, vata está reflejando expresiones de una mente rajásica. Es habitual que una mente rajásica se deje manipular por el ego y termine enredado dentro de su propio drama, distanciándose de su espíritu. El reto aquí consiste en apartarse de esa verdad aparente que la mente esboza, colocarse como observador de lo que ve sin emitir juicios sobre lo que observa.
Si el reto para una mente rajásica está en distinguir quién se es, la mente sattvica de vata transmite naturalmente ese ser que transita y vive dentro de él. Y es que la naturaleza inquieta, efervescente y alegre de vata deja traslucir el ser de luz que habita en nosotros. Es común que entre personas vata con mente sattvica encontremos artistas y sanadores, gente con mucha sensibilidad y creatividad que inspiren en su práctica a otros, a la vez que transmiten luz.
A diferencia del entusiasmo de tipo rajásico, el entusiasmo sattvico, no se mide en exceso de energía e inquietud desbordada. En este caso no encontramos rasgos de ansiedad, por el contrario se observa genuina conexión y fe en Dios así como en su propio Ser. Entusiasmo genuino que se traduce como la manifestación de Dios en su interior.
El estado de conciencia tamásico expresa la naturaleza más oscura de la mente de vata. Aquí, es común ceder a conductas autodestructivas y adictivas. En este mundo de confusión y caos es usual desarrollar trastornos mentales, vínculos dependientes, e incluso rasgos suicidas. En líneas generales su capacidad para sobrevivir y adaptarse en el mundo son más complejos y gradualmente con el tiempo, si no hubo una identificación prudente de su frágil personalidad, tiende a empeorar y en muchos casos esa perdida es irreversible.
La relación de Vata entre el guna dominante y el desequilibrio dóshico (prakruti) delinea los rasgos de nuestra naturaleza psicológica y personalidad. Ayurveda a través de los gunas, ofrece una entrada diferente e interesante de comprender y acceder al complejo mundo de los estados emocionales y a la trascendencia de los mismos. ★
Basado en Halpern, Marc. 2001. Principio de la Medicina Ayurveda. Libro para la profesión ayurvédica. Segunda edición en español
Conoce más sobre el estilo saludable del dosha Vata.