La interocepción nos vuelve más conscientes

La interocepción nos vuelve más conscientes: ¿Cómo respondes a las emociones fuertes? La interocepción (percepción de sensaciones internas) nos ayuda a detectar señales corporales sutiles que son cruciales para la regulación emocional. Mejorar la interocepción ofrece un camino hacia la estabilidad emocional y la autoconciencia. La sabiduría ayurvédica puede ayudarte a navegar por tu paisaje interior y fomentar respuestas conscientes arraigadas en el amor y la compasión.

La interocepción nos vuelve más conscientes: ¿Qué es la interocepción?

Probablemente hayas oído hablar de la propiocepción, que es un sentido que nos permite percibir el movimiento, la acción y la ubicación de nuestro cuerpo en un momento dado. La interocepción es una capacidad similar que percibe las señales internas del cuerpo. Es la percepción de sensaciones desde el interior del cuerpo. Esto incluye la percepción de sensaciones físicas relacionadas con la función de órganos como los latidos del corazón, la respiración y la saciedad, así como la actividad del sistema nervioso autónomo relacionada con las emociones.

Para muchos, estas señales internas son difíciles de identificar, mientras que a otros les resulta más fácil percibir estas señales sutiles. La conciencia interoceptiva (la capacidad de percibir estas señales sutiles) está vinculada a la regulación emocional y la estabilidad emocional. Si bien muchas de estas señales permanecen subconscientes, los investigadores están descubriendo que aprender a percibir mejor estas señales es posible y es una herramienta poderosa para manejar el estrés, el trauma (TEPT) y mantener el equilibrio emocional.

Desarrollar la conciencia interoceptiva es una herramienta valiosa para integrar las sensaciones corporales, los procesos cognitivos y los sentimientos emocionales. Según Ayurveda, para que se produzca un cambio transformacional, primero debemos aumentar nuestra autoconciencia (interocepción) y luego, utilizando esa conciencia, actuar. La investigación sobre la interocepción sugiere que la conciencia interoceptiva es una ventana a nuestra experiencia emocional, que nos proporciona acceso a importantes mecanismos de regulación de las emociones. La regulación emocional requiere la percepción temprana de señales internas que son precursoras de una reacción o acción emocional. El aumento de la conciencia interoceptiva nos permite sentir, percibir e interpretar estas señales en el cuerpo antes de que la mente se involucre en una reacción emocional inquietante. Con este mayor sentido de autoconciencia, podemos elegir una respuesta más consciente. Esto puede ayudarnos a ser intencionales con respecto a nuestra expresión emocional, en lugar de dejar que una reacción emocional inconsciente familiar se haga cargo.

La interocepción nos vuelve más conscientes: Interocepción y psicología ayurvédica

En nuestro mundo actual, la mente ha sido condicionada a participar en comportamientos que brindan una sensación de recompensa, satisfacción o logro en forma de la “hormona de la recompensa”: la dopamina. Desde la niñez nos volvemos adictos a utilizar nuestros sentidos para buscar placer en el mundo exterior. Cuando hay falta de placer o recompensa, también hemos sido condicionados a interpretar ciertas señales interoceptivas (como sentimientos heridos, miedo, ira, celos, necesidad y juicio) como una amenaza. La mayoría de nosotros somos bastante conscientes de estas señales amenazadoras. Por lo general, reaccionamos ante ellos creando patrones de comportamiento que protegen las emociones y que brindan una sensación gratificante (como ir de compras, comer, culpar, arremeter, sentir ansiedad, deprimirnos y muchas más). Todas estas reacciones emplean los sentidos externa y agresivamente para buscar una recompensa o bloquear la experiencia sensorial interna de los sentimientos o la autoconciencia interoceptiva.

La solución ayurvédica a este dilema es mejorar la autoconciencia. Las herramientas clásicas son las herramientas probadas como el yoga, el pranayama y la meditación. Pratyahara es quizás la herramienta védica más específica para aumentar la conciencia interoceptiva.

Pratyahara

Pratyahara es una práctica que utiliza los sentidos como vías de conciencia para volverse más consciente de las señales internas sutiles del cuerpo. Este es el primer paso para experimentar el gran “Yo”: esa parte de nosotros que se basa en la conciencia más que en las emociones. Las técnicas de conciencia interoceptiva, como la conciencia plena en la terapia orientada al cuerpo (MABT), intentan hacer lo mismo: instarnos a volvernos conscientes y aprender a percibir las señales sutiles que permanecen inconscientes para la mayoría de nosotros.

La perspectiva ayurvédica sugiere que cuando mejoramos nuestra autoconciencia, podemos tener una reacción consciente o basada en uno mismo ante el estrés y el trauma. En lugar de reaccionar instintivamente a las señales de estrés y miedo, la conciencia interoceptiva ofrecerá una nueva opción para la acción transformadora. Se basará en el deseo de dar, amar, cuidar, comprender y tener compasión por la situación. En Ayurveda y Yoga, esto se llama sattwa: un estado mental en el que podemos amar sin motivo alguno. Podemos dar a los demás y no sentir pérdida. Es un estado de ánimo que puede resultar natural en los seres humanos. Sólo evitamos esta forma de ser porque la mente se ha vuelto adicta a la hormona de recompensa dopamina y nos hemos convencido de que la satisfacción sólo puede venir de estímulos externos. Esta búsqueda de satisfacción externa se llama comportamiento rajásico en Ayurveda y Yoga. Con el tiempo, a medida que los receptores de recompensa se vuelven menos receptivos, podemos optar por retirarnos y “protegernos” emocionalmente y volvernos deprimidos y temerosos. Esto se llama comportamiento tamásico en Ayurveda.

Aumentar la conciencia interoceptiva nos permite pasar por alto las respuestas emocionales instintivas de necesidad y, en cambio, participar en una respuesta consciente mezclada con amor y bondad.

Pratyhara 101

En los textos ayurvédicos donde se enumeran la causa y el tratamiento de cada condición de salud, la primera lista de tratamiento para casi todas las condiciones es “no suprimir los impulsos naturales”. Estos impulsos naturales son sólo algunas de las señales interoceptivas de las que todos somos muy conscientes, pero a menudo optamos por ignorarlas casi todas. Estos son tos, estornudos, flatos, orinar, eructos, deposiciones, dormir, sed, hambre, bostezos, llanto, vómitos, eyaculación y respiración agitada.

El primer paso para aumentar la conciencia interoceptiva es ser más consciente de las señales internas del cuerpo y dejar de ignorarlas, posponerlas o retrasarlas. ¡Sintonízate y escucha tu cuerpo!

Por: Dr. John Douillard, DC, CAP.